martes, 7 de octubre de 2014

EL PEZ CARDENAL DE BANGGAI (Pterapogon kauderni).



EL PEZ CARDENAL DE BANGGAI (Pterapogon kauderni).


Descubierto para la ciencia en 1.933, es a partir de 1.996 cuando su presencia se hace más popular, situándolo a partir de entonces en peligro de extinción por ser un pez de baja fecundidad y cuya presencia está restringida en un área delimitada al este de la isla de Sulawesi en Indonesia. Se ha convertido en una especie muy popular entre los diversos acuarios de Norteamérica, Japón y Europa lo que conlleva que las capturas de la especie en su medio natural hayan aumentado drásticamente.

Los juveniles forman grupos numerosos que se protegen entre las espinas de erizos, anémonas y corales, pero cuando maduran sexualmente se convierten en individuos solitarios para el momento de la reproducción. Como en el caso de todas las especies de peces cardenales, el macho incuba los peces en la boca, pero a diferencia del resto de las especies de apogónidos, mantienen las larvas en la boca unos 10 días más una vez que los huevos han eclosionado. Su baja tasa de fecundidad (unos 50 huevos por puesta, frente a los cientos de miles de otras especies) al carecer de fase larvaria pelágica en su desarrollo y su firme establecimiento en ciertos microhábitats cerca de los fondos, explica su limitada distribución geográfica.

Escrito por Aurelia Artolachipi 
Foto: Manuel Campillo

UNA ESPONJA COMO HOGAR, Cangrejo ermitaño, Paguristes eremita.




UNA ESPONJA COMO HOGAR, Cangrejo ermitaño, Paguristes eremita.

La mayoría de los cangrejos ermitaños protegen su blando abdomen dentro de la concha vacía de un molusco gasterópodo que transportan por doquier como hogar ambulante. Pero el cangrejo ermitaño Paguristes eremita en muchas ocasiones decide elegir otro tipo de casa y se asocia con la esponja Suberites domuncula, normalmente con forma esférica o subesférica, y en ella se instala.

La esponja goza de nuevas ventajas: La movilidad que antes no poseía y aprovechar las partículas que le proporciona su transportista cuando se alimenta. A su vez, el cangrejo se protege de sus enemigos, principalmente los pulpos, que frenados por las sustancias tóxicas de los tejidos la esponja no osan destruirla para alcanzar el preciado tesoro que esconden. Pero aquí no acaban las ventajas de esta elección. El inquilino ya no tiene que cambiar de casa cuando va creciendo, ¡la casa crece con él!

Escrito por Aurelia Artolachipi 
Foto: Manuel Campillo